La historia comienza con las muertes de tres niños en el verano de 2001 en Swanton, un pequeño pueblo en el estado de Vermont, al norte de los Estados Unidos y muy cerca de la frontera con Canadá. Un lugar que, al parecer, existe en la realidad, al igual que el lago Champlain en torno al cual gira toda la historia. La vida de Eric, amigo íntimo de las tres víctimas, se ve afectada por esos sucesos de forma trágica, convirtiéndolo en un joven inseguro, enfermizo y embriagado por el complejo de culpabilidad. Rozando la treintena, ha malgastado media vida intentado enterrar los recuerdos. Un intento inútil, desde luego, porque el horror de su infancia regresa a él sin piedad una mañana de la forma más inesperada posible: a través de un libro escrito por una de las víctimas. Ese será el detonante para que Eric regrese a Swanton y se enfrente de una vez por todas a los fantasmas del pasado, tanto en sentido literal como metafórico.
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| ¡Atrás, insensato! Harías bien en alejarte de la orilla del Champlain (1) |
La peripecia, como la ambientación, recuerda inevitablemente a "It", del maestro Stephen King. Sin embargo, "Los crímenes" enseguida sabe encontrar su propio territorio sin caer en el plagio. La narración, en primera persona, fluctúa entre el pasado y el presente, y en ningún momento se hace farragosa. Al contrario, el misterio se desgrana poco a poco de un modo muy comprensible, casi inevitable. Así, cuando el inesperado final se le viene a uno encima, se tiene esa sensación de que todas las piezas han encajado correctamente en su lugar, como si las cosas no pudieran ser de otra forma a pesar de lo sorpresivo de la situación: señal de que la autora ha hecho muy bien su trabajo a la hora de diseñar la trama.
El trío protagonista es de lo más curioso: un joven atormentado y desvalido que parece la persona menos adecuada para enfrentarse a la formidable amenaza que se cierne sobre Swanton, un duro sherriff de pueblo que uno imagina con el aspecto de un John Wayne o un Brian Dennehy entrados en años, y una bruja de buen corazón a la que medio pueblo teme y de la que el otro medio se ríe. Los tres son personajes muy bien perfilados y hacia los que es fácil sentir empatía.
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| No puedo evitarlo: así me imagino yo al Sheriff Dunning (cambia la americana por un uniforme y ponle la chapita dorada en el pecho, claro) (2) |
Como toda novela de género que se precie, hay momentos espeluznantes. Muy bien narrados, por cierto, con un estilo directo, de frases cortas, y un ritmo sostenido que nunca se hace pesado. A pesar de haber asistido mil veces (en la literatura y el cine) a la visita de un fantasma en mitad de la noche o al ataque de un espíritu maligno durante sesión de ouija, eso no resta vigor a estos episodios en la novela. Al contrario, la aceptación de las reglas tácitas del género nos facilita entrar en ellos directamente, sin necesidad de explicaciones inoportunas que frenen en ritmo.
Con todo, uno de los mayores aciertos de la historia, en mi opinión, es que la autora alterna esos momentos de terror clásico con otros mucho más sentimentales, bordeando incluso la sensiblería (sin llegar a caer nunca en ella). Ese contraste consigue que unos y otros momentos brillen con más intensidad y que la novela se eleve por encima de la media y encuentre su propia y particular voz en medio de esa inevitable (¡y saludable!) algarabía de obras independientes que inundan los mercados virtuales en los últimos tiempos.
A pesar de ser una obra autopublicada, y de tratarse de una autora semidesconocida, Gemma Herrero Virto, nacida en Vizcaya en 1974, no es ninguna recién llegada ni la consistencia de "Los crímenes del lago" es una casualidad. Hay mucho oficio encerrado detrás de estas páginas. No en vano, constituye la octava novela escrita y publicada por su autora. Sin duda, un nombre que conviene seguir con atención.
"Los crímenes" es una de las cinco obras finalistas del Premio Amazon 2017 que se fallará a finales de mes. Así que solo me queda añadir: ¡buena suerte!
Puedes encontrar más información sobre la autora aquí.
Y aquí tienes "Los crímenes del lago" en Amazon por 2,99 € en su versión electrónica.
Créditos de las imágenes
- (1) Atlant en Wikimedia Commons con licencia CC BY 2.5
- (2) Justin Hoch en Flickr con licencia Creative Commons Attribution.
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